Cómo superar una infidelidad en pareja

¿Por qué aparece una infidelidad en la pareja?

Seguro que si has sufrido una infidelidad te preguntas, y ahora…¿Cómo lo supero? Cada pareja y cada relación tiene una forma diferente de comprometerse, por lo que esta situación puede ser vivida de maneras totalmente distintas.

Cuando se produce una infidelidad, una parte importante de la relación de pareja se ve gravemente afectada. Se trata de la ruptura de la promesa de fidelidad que existe entre dos personas. Así que, la persona engañada, probablemente, se sentirá fuertemente traicionada y dolida. Todo ello puede generarle dificultades emocionales en las áreas vitales en las que se desenvuelve.

La infidelidad no solo es engañar o quebrantar un código moral, es lastimar, herir y destruir al semejante Walter Riso.

Los motivos por los que alguien es infiel:

¿Por qué ha sucedido? Sin duda, esta es la pregunta estrella que las personas suelen formularse cuando se encuentran ante esta situación. Lo que sucede es que, en muchas ocasiones, no existe una respuesta. Y es necesario que aceptemos esta posibilidad para poder asumir este suceso.

No hay una causa única y exacta que explique la infidelidad. Se trata de un hecho que puede tener detrás muchos factores. Algunos ejemplos son: atracción sexual, oportunidad, deseo…

Ser infiel es una decisión propia que nadie obliga a tomar. Sin embargo, existen algunos aspectos que pueden actuar como desencadenantes para que se cometa una infidelidad en la pareja:

  • Falta de comunicación: Todo principio en una relación es bonito, idílico, y además se goza de una muy buena comunicación en la pareja, ya que ambos miembros se están descubriendo y conociendo entre sí. No obstante, si esto no se trabaja de forma diaria y constante, el paso del tiempo puede deteriorar esta área. Cuando las personas dejan de expresar sus sentimientos y preferencias en la pareja y comienzan a “dar por hecho”, la relación puede entrar en una fase de pasotismo y dejadez, que da pie a discusiones y malentendidos diarios que terminan por desgastar mental y emocionalmente.
  • Incapacidad de compromiso con una sola persona: Es un motivo excepcional. Va de la mano con la personalidad de la persona y la negativa de querer centrarse y apostar exclusivamente por la pareja con la que comparte su vida. También puede asociarse con la existencia de una compulsión sexual muy evidente.
  • Curiosidad y atracción física: “Echar una canita al aire” o “tener una aventura”. ¿Te suena? En estos casos, no suele haber ninguna intención de romper el compromiso con la pareja, sino que la finalidad va por otro lado. Es el hecho de realizar un acto prohibido y saber qué se siente. Quizás, esto puede ser reforzado por la sociedad en la que vivimos, que invita al cambio y a la necesidad de experimentar cosas nuevas. “Fue una noche”o “No significó nada” son algunas reacciones típicas en estas circunstancias. Podrían definirse como formas de intentar quitarse responsabilidad, dado que se quiere continuar en la relación con la pareja. De igual forma y aunque las pretensiones sean proseguir en la relación, provoca un fuerte daño y quebranta de raíz la confianza amorosa. Es aquí cuando se pone de manifiesto la necesidad de quererse y valorarse a uno mismo, con el objetivo de poner límites ante situaciones que nos duelen.
  • Se ha acabado el amor (o eso parece): Las relaciones de pareja pasan por diferentes etapas a lo largo de su desarrollo. Las personas evolucionan, por lo que es inevitable estar siempre en el mismo punto. En muchas ocasiones, el paso de una fase a otra se percibe como un fracaso cuando no tiene por qué ser así. Al contrario, esto te permite avanzar y proponerse nuevos retos. Al considerar estos cambios en la pareja como algo negativo se puede llegar a la conclusión de que ya no existe un vínculo amoroso, ya que el sentimiento es diferente. Lo que sucede es que esto no siempre es así. Muchas veces el amor no desaparece, sino que se construye de otra forma. Es una labor común de la pareja descubrirlo para poder cultivarlo y disfrutarlo.

Cómo superar una infidelidad

¿Qué pasa cuando descubres la infidelidad?

La realidad es que una vez descubierta la infidelidad, entras en un proceso vital en el cual tu autoestima, seguridad y confianza se ven fuertemente dañadas, tanto de forma personal como en la relación. Esto es lógico y debes darte permiso para sentirte así. Sé flexible y paciente contigo mismo y no te exijas demasiado. Sin embargo, es importante que encuentres la manera de canalizar y gestionar el torrente de emociones que estás sintiendo. Para ello, Evolma te aconseja que te pongas en manos de profesionales, con el objetivo de que puedan acompañarte en este camino de aceptación y crecimiento. La meta principal es que puedas transformar tu dolor en una fuente de desarrollo emocional y aprendizaje, que te permita sentirte fuerte y preparado para desenvolverte en las diferentes facetas de tu vida.

¿Qué dice la psicología sobre la infidelidad?

La infidelidad puede implicar una experiencia traumática de gran trascendencia. Es la infracción de la confianza en la pareja, donde se rompe el compromiso, el afecto, e incluso la intimidad. Esta vivencia está a la orden del día y origina infinitas grietas del corazón, causando situaciones que no siempre se saben manejar de forma eficaz.

El engaño a la pareja va mucho mas allá del carácter, la personalidad o la existencia de desgaste en la relación. La conclusión siempre es la misma: insatisfacción, sufrimiento, confusión. Y el complejo dilema sobre cómo actuar una vez que descubres que te han sido infiel.

“La confianza solo se pierde una vez” Anónimo.

Definiría a quien es infiel a su pareja como una persona que evita su realidad a través de un engaño. Quien es infiel es alguien insatisfecho a nivel personal y, por tanto, no se atreve a afrontar su verdad. Quizás por miedos o debido a que tiene un bajo concepto de sí mismo. Y es aquí cuando surgen los roces y las discrepancias entre los dos. Los conflictos del pasado que no han sido resueltos o los problemas de la propia pareja pueden agrandar la crisis amorosa.

Si te han sido infiel, recuerda que reprochar las cosas no es el camino porque no conduce a nada productivo, y las acusaciones son uno de los problemas a los que te sueles enfrentar en tu relación (y sabes que no funcionan).

Y, sin duda, la gran incógnita es:

¿Se puede solucionar?

La respuesta la tienes tú y es una decisión muy muy personal. Dedícate tiempo para sopesar y conocer lo que es mejor para ti. Escúchate y mira dentro de ti con atención. Hay parejas que deciden poner punto y final a su relación tras estas circunstancias. Otras, en cambio, salen reforzadas de este trance y su unión se fortalece. Ambas opciones son válidas y pueden ser positivas. Compartir tus pensamientos y expresarte emocionalmente es una buena vía de reflexión y aprendizaje en estos momentos.

Un engaño es un acto relevante que provoca consecuencias, por lo que es fundamental valorar con calma lo que conlleva para ti esa infidelidad. ¿Seguirás confiando? ¿Seguirás sintiendo con la misma intensidad? Tómate el tiempo que necesites para examinar y analizar de forma exhaustiva cómo te afectan todos esos sentimientos y reacciones emocionales que estás teniendo. Al mismo tiempo, es primordial que tomes conciencia de que lo sucedido no es tu responsabilidad e intentes eliminar posibles sentimientos de culpa desadaptativa. Las personas únicamente respondemos ante nuestros propios actos y no por los de los demás, aunque se trate de nuestra pareja.

Si te sientes identificado con este post, NO dudes en ponerte en manos de especialistas y profesionales de la salud mental para que te guíen y acompañen en esta nueva situación. Y recuerda: ahora más que nunca es esencial que te cuides y te trates con cariño y respeto. Ten en cuenta que existen muchas cosas que no dependen de ti. Pero potenciar tu autoestima e intentar maximizar tu bienestar y calidad de vida, son dos objetivos que sí que están en tu mano. Focalízate en ello para avanzar y sentirte más seguro en tu vida diaria.